Doctores Homeópatas contra homeópatas profesionales. Una vieja controversia que busca una solución.

La cuestión de quién tiene el derecho de practicar Homeopatía ya es antigua y yo diría que es muy sensible y difícil de resolver dado que ha girado sobre la Homeopatía por más de un siglo. ¿Tenemos una solución?

Como he sido acusado varias veces de que yo solamente apoyo la educación de doctores homeópatas, me siento obligado a ventilar mi opinión acerca de esta cuestión para prevenir una mala interpretación y prejuicios que no tienen nada que ver con qué postura tengo en este asunto.

Según tengo entendido, creo que el problema debería de verse desde tres ángulos diferentes:

A. Quien tiene el derecho legal de practicar Homeopatía?

1. Cada país tiene leyes que dictaminan la legalidad de quien puede y quien no puede prescribir medicinas. Por lo tanto, si estas leyes le dan el derecho a un homeópata profesional para practicar legalmente en su respectivo país, entonces yo no pienso que cualquier persona puede interferir con tales reglas.

2. En caso de que las leyes del país no le permitan a un profesional no médico practicar homeopatía, entonces dichas leyes pueden ser debatidas. El gobierno debería ser presionado para cambiar dicha ley. Pero tal presión para un cambio debería ser acompañada por ciertas regulaciones a instituciones dedicadas a enseñar la homeopatía y reguladas por edictos del gobierno.

3. En los casos donde la ley no permite que los doctores homeópatas practiquen homeopatía, es casi seguro que la Asociación Médica de dicho país o estado es responsable de esto (como en Suecia y en Carolina del Norte contra George Guess en los Estados Unidos); entonces dicha ley debería ser peleada vehementemente.

Claro que la lógica de la Asociación Médica es que debido a que en tus estudios médicos te fueron enseñadas ciertas disciplinas, te fue dado el privilegio de practicar solamente esas disciplinas que aprendiste y no algo más que has escogido practicar después de la graduación.

“Si por lo tanto deseas practicar otra disciplina, entonces tendrás que abandonar tu privilegio de practicar medicina, convertirte en una persona de oficio y después practicar lo que sea que te guste, pero te echaremos de esta asociación médica”.

B. Quien tiene el derecho moral de practicar Homeopatía?

Dado que la homeopatía todavía no se enseña en instituciones oficiales reconocidas, el derecho moral de quien la puede practicar es una cuestión seria que es hasta el momento dejada a la discreción del doctor homeópata o del homeópata profesional que decide practicarla. Esto implica más cuestiones que si sólo fuera considerada un dilema legal.

Cuando un doctor practicante decide arriesgarse y tomar la responsabilidad de la salud de las personas, entonces el público tiene el derecho de saber qué  nivel de conocimiento tiene este doctor practicante. El público en el tiempo presente no tiene manera de conocer de antemano lo que un individuo particular realmente sabe con respecto a homeopatía o medicina en general.

Esta cuestión ha sido dejada para ser decidida solamente por la conciencia de cada homeópata, quien puede ser el único juez en este asunto. Pero la pregunta es: cuántos de nosotros tenemos la conciencia suficientemente precisa para juzgar correctamente o para buscar mejor entrenamiento antes de sentirnos realmente listos para empezar a practicar?

He conocido doctores que empiezan a practicar homeopatía después de solamente algunos fines de semana de instrucción y entrenamiento; todavía no han aprendido los fundamentos y he conocido otros doctores que después de años de entrenamiento todavía se sienten incompetentes y vacilantes para enfrentar tal tarea tan sensible como tratar enfermedades crónicas con remedios homeopáticos.

He conocido doctores homeópatas que claman atroces hazañas curando cáncer o SIDA, etcétera y explotan a personas inocentes ingenuas buscando un salvador. Es cierto que algunas veces podemos tener resultados positivos en dichas condiciones tan severas pero esto no debería de ser anunciado como una posibilidad o certeza para todos los casos.

He conocido doctores que prescriben una multitud de remedios de los que no conocen nada, ni tienen idea de cuáles son los síntomas de estos remedios, dado que nunca han estudiado nuestra Materia Médica.

Y he conocido practicantes que usan todo tipo de trucos para atrapar a sus pacientes, como por ejemplo horquillas magnéticas para encontrar el remedio correcto, homeopatía de péndulo, homeopatía intuitiva, diferentes dispositivos electrónicos, etc.. muchos de ellos prescriben una multitud de remedios esperando que dentro de este grupo alguno por casualidad sea el correcto que produzca un buen resultado.

¿Dónde está el justo medio?

¿Dónde está las autoridades que haga cumplir los estándares necesarios para la educación homeopática?

Esta es una de las cuestiones más difíciles del día de hoy que buscan una solución.

Existen muchas más cuestiones que tienen que ser tomadas en consideración en este asunto. Por ejemplo practicantes de homeopatía con la mitad de entrenamiento parecen tener mejores resultados muchas veces que doctores homeópatas, pero al mismo tiempo otros practicantes con poco entrenamiento tanto en conocimiento homepático como alopático y un peligroso mal entendido de todas las cuestiones de tratar casos, son aventados al mercado sin ningún tipo de control o examen de sus habilidades médicas.

Es cierto que todos claman que la homeopatía es inofensiva en cualquier caso, pero es ésto completamente cierto? cuál es la responsabilidad moral de distintos gobiernos referente a esta cuestión?

C. Quién tiene el derecho científico de practicar Homeopatía?

Doctores homeópatas aseguran que sólo ellos tienen el derecho de practicar ya que son entrenados para entender la patología del caso, para conocer los peligros de un diagnóstico mal dado y el consecuente tratamiento erróneo, especialmente cuando medidas urgentes tienen que ser tomadas en un caso severo.

Pero por el otro lado nosotros sabemos que muchos casos mueren bajo excelente tratamiento alopático con un experto y no tenemos ninguna investigación que muestre qué podría pasar si dichos casos fueran dejados a un tratamiento homeopático de un experto.

No de que no vayan a morir, pero qué tal sobre la calidad de vida hasta el momento de la muerte?

Por todas estas razones es comprensible que la cuestión es añeja y difícil de resolver por cualquier persona o inclusive para proponer una solución que sea práctica. Pero también por todas estas razones, mi política desde el principio de mi carrera de enseñanza (1961) ha sido entrenar doctores homeópatas y homeópatas profesionales juntos. Cualquiera al que le sea permitido practicar legalmente en sus respectivos países lo he aceptado en mis seminarios con la lógica de que si les fuera permitido a ellos practicar, a lo mejor serían entrenados más profunda, correcta y completamente para que así pudieran producir mejores resultados.

En la historia de la educación homeopática creo que yo fui el primero en mezclar doctores homeópatas con no doctores homeópatas, en un mismo grupo; y me siento justificado en esta acción dado que varios de mis estudiantes en ambos grupos han mostrado buenos resultados terapéuticos.

Autor: George Vithoulkas
Extractado de la revista European Journal of Classical Homeopathy, vol 1 No. 3-4, pág 26 y 27, Fall-Winter 1995. Título original “Medical Doctors vs. Professional Homeopaths an old controversy that seeks solution”.
Traducido por el Dr. Ivan Silva Talavera.
Publicado en el 3er. Congreso Virtual de Homeopatía del Cono Sur, 2008.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es normal la postura de George, él hasta pace poco no era médico, ahora lo es y no puede ponerse de espalda de los que antes eran sus compañeros. Aparte que organizar cursos para sólo homeopatas médicos no es rentable. Le comprendo pero algun dia tendrá que aclararse. Dr.Luis Rekarte

Anónimo dijo...

Apreciado Sr. Lara:

Es de agradecer que publique Ud. esta entrada de Vithoulkas. Especialmente porque parece que las cosas se van poniendo cada vez más oscuras para los que somos homeópatas sin ser médicos.
Estamos en un punto en que parece que no hay posibilidad alguna de intercambio de ideas: solo imposición; no hay posibilidad de diálogo: sólo de escuchar y cumplir; no hay posibilidad de colaboración: solo de antagonismo.
No faltan los ejemplos cada día (por ejemplo la invectiva del Dr. Rekalde (de Gijón) contra mí -llamándome curandero- solo porque le dije que era homeópata tras haberle ofrecido mi ayuda para encontrar la Facultad de Medicina de Zaragoza, que él desconocía.

Creo que hay posibilidades y creo que si hay buena voluntad y una cierta madurez, los puntos de unión y de colaboración son posibles.
No pretendo hacer publicidad de mi página en este blog, pero hace ya días que escribí una entrada sobre este tema que creo que debería ser meditada.
http://cihotm.blogspot.com/2010/03/homeopatia-un-problema-que-no-es.html

Gracias y un saludo
Andrés Guerrero Serrano
-Homeópata-