El mayor estudio jamás realizado por un organismo oficial sobre la homeopatía llega a la conclusión de que la homeopatía no sólo funciona, sino que es más económica que la medicina convencional.
El Gobierno suizo tiene tras de sí una larga historia de neutralidad y quizás por este motivo los informes de este Gobierno en temas controvertidos deben tenerse más en cuenta que otros informes de países que están más influenciados por las actuales circunstancias económicas y políticas.
Cuando se sabe que dos de las cinco empresas más importantes de fabricación de medicamentos tienen su sede en Suiza, se podría pensar que este país tiene mucho interés en la medicina convencional, pero tal supuesto nos lleva a error.
A finales de 2011 se publicó un informe del Gobierno suizo sobre Medicina Homeopática, representando la evaluación más completa que sobre la Medicina Homeopática haya publicado un Gobierno, y recientemente ha aparecido en forma de libro en inglés (Homeopathy in Healthcare: Effectiveness, Appropriateness, Safety, Costs. Bornhoft y Matthiessen, Springer). Este informe afirma que el tratamiento homeopático es eficaz y rentable y que debiera estar incluido dentro del programa nacional de salud de Suiza.
Las investigaciones del Gobierno suizo sobre homeopatía y los tratamientos complementarios y alternativos, responden a una alta demanda y el uso generalizado en Suiza frente a la medicina convencional, no sólo por parte de los consumidores, sino también por parte de los médicos. Aproximadamente la mitad de la población de Suiza utiliza tratamientos de medicina complementaria y alternativos y los valora. Y además, aproximadamente la mitad de los médicos suizos consideran los tratamientos complementarios y alternativos eficaces. Quizás lo más importante es que el 85% de la población suiza prefiere terapias de este tipo y que formen parte del programa nacional de salud.
Desde 1998, el Gobierno de Suiza decidió ampliar su sistema nacional de salud incluyendo ciertas medicinas complementarias y alternativas, incluyendo la medicina homeopática, la medicina tradicional china, la medicina herbaria, la medicina antroposófica y la terapia neural. El reembolso de los gastos de estos pacientes fue una medida provisional, mientras el Gobierno suizo encargó un estudio para determinar si eran eficaces y rentables. El reembolso provisional de estos tratamientos alternativos finalizó en 2005, pero como resultado de este estudio, el programa nacional de salud ha comenzado de nuevo a reembolsar los tratamientos homeopáticos y otros tratamientos alternativos. De hecho, como resultado de un referéndum nacional, más de los dos tercios de los votantes apoyaron la inclusión de las medicinas alternativas y homeopáticas dentro del programa nacional de salud (Dacey, 2009; Rist, Schwabl, 2009).
Gobierno suizo: Evaluación de tecnologías sanitarias
La Evaluación de tecnologías sanitarias en la medicina homeopática es con mucho el informe más amplio que un Gobierno haya publicado hasta la fecha. No sólo este informe revisa con detenimiento y de forma global los ensayos clínicos a doble ciego aleatorio y controlado mediante placebo de los medicamentos homeopáticos, sino que también se ha evaluado su “efectividad en el mundo real”, así como la seguridad y la relación entre el coste y la efectividad. El informe también lleva a cabo una revisión integral de las investigaciones preclínicas (investigaciones fisico-químicas, estudios botánicos, estudios en animales e in vitro con células humanas).
Y aún hay más, este informe evalúa las revisiones sistemáticas y los meta-análisis, estudio de los resultados e investigación epidemiológica. Esta amplia revisión evalúa cuidadosamente los estudios realizados, tanto por la calidad de su diseño como por su ejecución (lo que se llama validez interna) y cómo se lleva a la práctica común homeopática (validez externa). El tema de la validez externa es de gran importancia debido hay científicos y médicos que realizan estudios sobre homeopatía y no tienen ningún conocimiento de este tipo de medicamentos (algunos estudios muestran que ciertos medicamentos homeopáticos se utilizan muy poco para la realización de pruebas, mientras que otros utilizan medicamentos que no están indicados para ciertos pacientes). Cuando estos estudios mostraron que la medicina homeopática no funcionaba, una evaluación precisa indicaba que dichos estudios habían sido diseñados para refutar la homeopatía… o simplemente, el estudio fue un ensayo exploratorio que buscaba evaluar los resultados de un nuevo tratamiento (ensayos exploratorios de esta naturaleza no están destinados a probar o refutar los medicamentos homeopáticos, sino sólo para evaluar el tratamiento para una persona en una situación específica).
“Este informe evalúa las revisiones sistemáticas y los meta-análisis, estudio de los resultados e investigación epidemiológica.”
Después de la investigación básica preclínica y los estudios de alta calidad, el informe del Gobierno suizo afirma que los medicamentos homeopáticos de “alta potencia” parecen inducir efectos reguladores (por ejemplo, el equilibrio o normalización de los efectos) y cambios específicos en las células y organismos vivos. El informe también señala que 20 de las 22 revisiones sistemáticas de la investigación clínica prueba que los medicamentos homeopáticos marcan una tendencia a favor de la homeopatía” (Bornhöft, Wolf von Ammon, et al, 2006).
El informe suizo encontró evidencias que apoyan el tratamiento homeopático de las infecciones de las vías respiratorias y las alergias respiratorias. El informe cita 29 estudios sobre “Infecciones del tracto respiratorio superior y reacciones alérgicas”, de los cuales 24 de ellos ofrecen un resultado positivo a favor de la homeopatía. Además, seis de los siete estudios controlados que compararon el tratamiento homeopático con el tratamiento médico convencional, mostraron que la homeopatía es más eficaz que las intervenciones médicas convencionales (el estudio encontró otro tratamiento homeopático equivalente al tratamiento médico convencional). Todos estos resultados del tratamiento homeopático no acarreaban los efectos secundarios comunes en el tratamiento farmacológico convencional. Al evaluar sólo los ensayos aleatorios controlados con placebo, 12 de los 16 estudios mostraron un resultado positivo a favor de la homeopatía.
Los autores del informe del Gobierno suizo reconocen que una parte de la revisión general de la investigación incluye revisiones negativas de la investigación clínica homeopática (Shang, et al, 2005). Sin embargo, los autores señalaron que esta revisión de la investigación ha sido ampliamente criticada tanto por los defensores como por los detractores de la homeopatía. El informe señala que el equipo de Shang ni siquiera se adhiere a las directrices de QUÓRUM, que son ampliamente reconocidas como normas para la información científica (Linde, Jonas, 2005). El equipo de Shang evaluó inicialmente 110 ensayos clínicos homeopáticos y luego trató de compararlos con 110 ensayos médicos convencionales. Shan y su equipo determinaron 22 estudios homeopáticos de alta calidad, contra sólo 9 de alta calidad en el ámbito de la medicina convencional. En lugar de comparar estos ensayos de alta calidad (lo que habría dado un resultado positivo para la homeopatía), el equipo de Shang fijó criterios que ignorasen la mayoría de los estudios homeopáticos de alta calidad, con lo que daba apoyo a su hipótesis original y establecía prejuicios en torno a que los medicamentos homeopáticos no son efectivos (Lüdtke, Rutten, 2008).
El informe suizo señala también que David Sackett, médico canadiense que es considerado como uno de los pioneros en la “medicina basada en evidencias”, ha expresado su profunda preocupación ante los investigadores y médicos ya que se considera que sólo los ensayos clínicos y a doble ciego son el medio para determinar si un tratamiento es efectivo o no. Para hacer esta afirmación, habría que reconocer que prácticamente todos los procedimientos quirúrgicos son poco científicos o no probados, porque muy pocos han sido sometidos a ensayos aleatorios a doble ciego.
En mi opinión, para que un tratamiento se considere efectivo o probado científicamente, se requiere de una evaluación mucho más completa de lo que se suele hacer. En última instancia, el informe del Gobierno suizo sobre la homeopatía representa una evaluación de la misma, incluyendo una evaluación de los ensayos clínicos aleatorios de doble ciego, así como otras evidencias, todos los cuales en su conjunto conducen a determinar que los medicamentos homeopáticos son efectivos.
¿Qué es la homeopatía?
Descubierta al final del siglo XVIII, gracias a las observaciones y experimentos del Doctor Samuel Hahnemann, la homeopatía se basa en una realidad biológica, ya conocida por Hipócrates, la ley de similitud: “Toda substancia capaz de provocar síntomas patológicos en un individuo sano, es capaz, a dosis infinitesimales, de tratar esos síntomas en un individuo enfermo”. Descubierta al final del siglo XVIII, gracias a las observaciones y experimentos del Doctor Samuel Hahnemann, la homeopatía se basa en una realidad biológica, ya conocida por Hipócrates, la ley de similitud: “Toda substancia capaz de provocar síntomas patológicos en un individuo sano, es capaz, a dosis infinitesimales, de tratar esos síntomas en un individuo enfermo”. Este conocimiento exacto de la similitud entre el medicamento y la enfermedad, justifica el objetivo, específico de la Homeopatía, de individualizar al enfermo y su tratamiento, utilizando las capacidades de reacción de cada persona. Aplicando estos principios, la homeopatía utiliza substancias orgánicas, minerales y vegetales para estimular las defensas inmunitarias del organismo. De este modo, el cuerpo puede movilizar sus defensas propias, en contra de los agentes patógenos, virus y bacterias, y recuperar su equilibrio, desestabilizado por las agresiones de la vida moderna (estrés, contaminación, etc.). La homeopatía se fundamenta en dos leyes: ley de la similitud o ley de los semejantes y la ley de la infinitesimalidad.
En homeopatía, y especialmente en enfermedades crónicas, el objetivo es ir más allá del alivio de los síntomas que van apareciendo, se busca ayudar al paciente a restablecer globalmente su equilibrio natural. Para ello, el médico homeópata en la consulta tendrá en cuenta, además de los síntomas o problemas de salud que presenta el paciente, su constitución física y su forma de reaccionar y sensaciones frente a la enfermedad, además de factores de mejoría o de empeoramiento. Por eso se dice que el tratamiento, en homeopatía, es más personalizado.
Homeopathy in Healthcare: Effectiveness, Appropriateness, Safety, Costs. Gudrun Bornhöft, Peter F. Matthiessen (eds). Springer.
Este volumen incluye el informe completo de la Evaluación de tecnologías para la salud en lo que dice relación a la efectividad, pertinencia, seguridad y costos de la homeopatía en la salud. El informe fue solicitado por las autoridades suizas a fin de tomar decisiones informadas en relación a la inclusión de la homeopatía en la lista de servicios cubiertos por los seguros de salud. Otros estudios llevados a cabo como parte del Programa de evaluación de medicinas complementarias suizo han causado reacciones mezcladas debido a su enfoque exclusivamente cuantitativo y esquemático con resultados negativos para la homeopatía. El presente estudio, como contraste, ofrece una evaluación diferenciada de la práctica de la homeopatía en el cuidado de la salud y confirma que la homeopatía ofrece una contribución valiosa a la medicina convencional, algo que ya sostenido por largo tiempo en la práctica del cuidado de la salud.