EL SINDROME DE REACCIÓN POST-VACUNAL

Evaluación de un método y resultados de una investigación prospectiva Después de una primera presentación del diagnóstico, tratamiento y prevención del síndrome post-vacunal (PVS) publicado en Links en 1994 (1), ha transcurrido el tiempo suficiente para poder elaborarlo de una manera más extensa y poder demostrar la solidez del uso de las vacunas potentizadas. Durante este tiempo, el Dr. Cees Baas y yo mismo organizamos una investigación prospectiva entre los homeópatas holandeses para saber con que frecuencia vemos casos de daño post-vacunal y cúal es el método más efectivo para tratar estos casos. Todos los casos nuevos se podían enviar entre enero y diciembre de 1999. Recibimos 209 casos. Los resultados se presentaron en noviembre del 2000 a la Sociedad Homeopática Holandesa (VHAN) y participaron más de 80 médicos. Se debían responder 20 preguntas para cada caso. El uso de vacunas potentizadas esta ampliamente extendido en Holanda en la actualidad. Cuando publiqué mi librito sobre el síndrome de reacción post-vacunal en 1995, no todo el mundo estaba de acuerdo con este método. Incluso fuí acusado de maluso del noble arte de la homeopatía. Pero desde entonces más de 10.000 de estos libritos se vendieron en Holanda y algunos menos en inglés, francés y alemán(3). Mucha gente, médicos y pacientes, visitaron mi página web (http://www.tinussmits.com/) y me escribieron cartas entusiasmados. Cada vez más gente experimentó la eficacia del tratamiento del PVS (Post-vaccination syndrome) con las vacunas correspondientes dadas en forma de dosis homeopáticas. Este método fue introducido por el Dr. Senn de Suiza y actualmente es práctica común en este pais. En este artículo voy a describir el método una vez más y a exponer mis comentarios desde mi amplia experiencia con él. Voy a describir diferentes casos para mostrar lo maravillosamente bien que actua esta terapia. Voy a dar también los resultados de nuestra investigación hecha en el 99 al mismo tiempo que nuestros planes para futuras investigaciones. Método El método es simple. La vacuna sospechosa de haber producido un efecto adverso es dada en 4 potencias distintas, a saber, 30K, 200K,MK y 10MK. Dependiendo de la gravedad del caso y del nivel energético del paciente, estas dosis se dan en 4 días consecutivos o bien en una pauta más lenta en el curso de 4 semanas. Siempre que exista una reacción clara con una dosis, se repite la misma potencia cuando la reacción se ha acabado. Si la reacción es bastante fuerte, se puede dar, durante algún día, una dilución de la misma potencia que causó la agravación. En los casos agudos una 30K en dilución durante algunos días, es lo más efectivo. Si después de la vacuna sospechosa de producir reacción, se han dado otras vacunas, es prudente de tratar primero las más recientes, en el order inverso y de acuerdo con la Lei de Hering para evitar agravaciones y bloqueos. Después de cada cura es conveniente esperar al menos 14 días antes de iniciar la siguiente. La mayor parte de las veces no es suficiente con dar solamente una serie de vacunas potentizadas, primero porque los síntomas no suelen desaparecer completamente con tan sólo una serie y en segundo lugar porque suele haber una recaída al cabo de una, dos o más semanas, como ocurre también con los remedios constitucionales. En los casos graves como epilepsia, asma, eczema, artritis reumatoide, etc… a veces hay que repetir hasta diez o más veces estas series para obtener una curación completa sin recaídas. El error más común en este campo es probablemente que los homeópatas dan tan sólo una serie o una sola potencia de la vacuna dinamizada y después empiezan enseguida con el tratamiento constitucional, creyendo que el efecto de la vacuna ya ha sido desintoxicado. Diagnosis 1.El diagnóstico del síndrome de reacción post-vacunal(PVS) consiste en dos partes. Primero hay que pensar en él y en segundo lugar hay que confirmar el diagnóstico. En realidad muchos homeópatas empiezan el tratamiento constitucional de buenas a primeras sin considerar primero la causa de los problemas. En mi opinión, esto es un gran error. He visto tantos niños tratados durante años con su remedio “constitucional” sin ningún tipo de resultado y que después han sido curados facilmente con la terapia causal de las vacunas potentizadas. Cuando hay que considerar el PVS? En primer lugar cuando los síntomas empiezan en una persona sana después de una vacunación. Una reacción aguda después de la vacuna no juega un papel demasiado importante. En cerca del 30% de los casos crónicos de nuestra investigación no se había producido ninguna reacción aguda! . La mayor parte de las veces la entrada en la guardería o el cese de la lactancia materna no son las causas reales. Cuando el desarrollo de un niño sano empieza a declinar o se para, hay que pensar en un PVS. Cuando se producen resfriados repetidos o un estado catarral crónico y infecciones como otitis, bronquitis, etc…a menudo las vacunas son la causa. Otras indicaciones pueden ser : agravaciones de transtornos ya existentes, aumento de la severidad de las reacciones agudas después de cada vacuna, pero también la disminución de la intensidad de estas reacciones pues significa que la capacidad de reacción esta siendo seriamente dañada ; enfermedades crónicas que se manifiestan después de vacunación tales como epilepsia, asma, leucemia, reumatismo,etc..; transtornos de conducta o cambios bruscos en el humor, pérdida del contacto visual, inquietud, agresividad ; alergias en la primera infancia especialmente a la leche y al azucar ( para más detalles ver http://www.tinussmits.com/). 2. La homeopatía tiene un papel muy importante en la detección de los efectos secundarios a vacunas. La medicina alopática es incapaz de determinar si la enfermedad esta relacionada con la vacunación o no, no tiene ningún método para ello. Esta es la razón por la cual la mayor parte de los casos que se presentan ante las autoridades sanitarias son clasificados como meras coincidencias, por lo menos en Holanda, pero me parece que la situación no es mucho mejor en otras partes. Un ejemplo dramático de ello es el caso de Casper. Tenía 3 meses de edad cuando recibió su primera dosis de DTPP (difteria, tétanos, pertusis, polio-salk- y Hib). Hasta este día era un niño muy sano sin ningún tipo de problema médico ni de otro tipo. Seis horas después de la vacuna tuvo una convulsión fuerte que duró unos 45 minutos, motivo por el cual ingresó en el hospital. El caso se comunicó a las autoridades responsables (RIVM) antes de proceder a nuevas vacunaciones. Aconsejaron de continuar con las vacunaciones sin ninguna precaución especial porque se consideró que la epilepsia no tiene ninguna relación con las vacunas. Tuvo de nuevo una fuerte convulsión 6 horas después de la segunda dosis. Se le aplicaron todas las vacunas sin ninguna modificación. Casper es ahora un chico de 4 años que no puede librarse de sus crisis epilépticas a pesar de la medicación anticonvulsionante, y que tiene un retraso considerable. El uso de las vacunas potentizadas le ayudó mucho, ahora estar sin crisis epilépticas y ha podido parar la medicación alopática. No es un caso excepcional. Lo mismo ocurrió con Raúl. Fue vacunado al mediodía, también a los 3 meses, y tuvo una convulsión que duró 40 minutos a la 1 de la madrugada. La madre paró todas las vacunaciones. Pero este caso nunca fue reconocido como post-vacunal, incluso el pediatra se negó a escribir en su ficha que la convulsión se produjo en menos de 10 horas después de la vacuna, solamente marcó la fecha de la convulsión. Actualmente esta seriamente incapacitado, a la edad de 10 años. Los medicamentos alopáticos tampoco le ayudan. Cuando la madre presentó su caso en la televisión holandesa, el médico de familia que estaba comentando los casos dijo que era pura coincidencia y que hubiera ocurrido igualmente sin la vacuna. En Holanda los padres reciben un pequeño libreto en la primera vacunación de su hijo en el que se dice que en Holanda nunca ha habido ningún caso de reacción grave a las vacunas y que nunca nadie Ha muerto a consecuencia de ello. Pero en Japón el número de complicaciones neurológicas severas con secuelas bajó desde 57 casos con 3 muertes hasta 8 casos con 3 muertes en un período de 5 años, después de que se pospuso la DTP de los 3 meses a los 2 años en 1975 (2) Es fácil de comprender porque la homeopatía tiene un importante papel que jugar en el diagnóstico médico del daño post-vacunal. Si después de la administración de la vacuna potentizada el paciente está mucho mejor o se cura, la vacuna tiene que ser señalada como la causa responsable. En cambio, si no está mejor después de la administración, hay que considerar otra causa. En Holanda estamos planeando empezar una investigación controlada a doble ciego, para determinar la eficacia de esta aproximación homeopática. Homeópatas experimentados con el diagnóstico y tratamiento del PVS seleccionarán pacientes que crean afectados por efectos de vacunas. El resultado mostrará cuan efectivo es este método y cuanto mejor es al uso de placebo. Si la efectividad se demuestra suficientemente, podemos usar este método de las vacunas potentizadas como un instrumento diagnóstico. Casos Cuando usamos las vacunas potentizadas tenemos que ser conscientes de que su uso está de acuerdo con el parágrafo 53 del Organon, y que el uso de agentes causales potentizados es un principio universal, no sólo efectivo en cuestiones vacunales. La similitud es importante. Tenemos que usar el material exacto potentizado que ha causado el daño. Debido a que las vacunas no son completamente iguales en los diferentes paises, cada país debe usar sus propias vacunas potentizadas, o el homeópata debe investigar que tipo de vacuna ha usado cada paciente. Porque no sabemos qué ha causado el daño en cada caso individual, si la vacuna misma, los conservantes como el hidróxido de aluminio o el mercaptilato, etc..o la contaminación en los cultivos celulares en huevos, riñones, etc… Cualquier farmacia homeopática es capaz de hacer la potentiación. En Nepal, hace unos años cuando estaba allí para el proyecto del Bhakatapur International Homoeopathic Clinic, no disponíamos de estos remedios y nos enfrentamos a un caso severo de PVS en un niño de 5 meses. Los estudiantes prepararon manualmente la potenciación hasta la 30K. El niño se curó en un día de sus opistótonos, la mirada fija y la fiebre. Caso 1 El primer caso muestra claramente como la vacuna potentizada puede indicar la causa real de la enfermedad. Marten recibió su vacuna DTPol justo después de su cuarto aniversario. No se sentía muy bien ese día y tenía la garganta un poco roja, pero esto no es ninguna contraindicación para la vacuna, almenos en Holanda. Al día siguiente la temperatura subió hasta 38,8ºC y no fué a la escuela. Mientras la madre hacía el trabajo de la casa en el piso de abajo, él la empezó a llamar desde arriba de la escalera. Cuando llegó abajo dijo : Mama, yo….y se cayó inconsciente. Estuvo inconsciente durante 8 minutos. Por el camino del hospital tuvo varias convulsiones con paro respiratorio. Fué admitido en la UCI en coma y tuvo que recibir respiración artificial. El cerebro no mostraba ningún signo de hemorragia o fractura, además de los signos de edema. Finalmente fué dado de alta con 3,5 ml de Depakine 2 veces al día y sin convulsiones. Pero Maarten ya no es el mismo. Tiene ausencias, está somnoliento, no acaba de estar del todo presente y en la escuela es incapaz de funcionar normalmente. Su habla se ha vuelto casi ininteligible. El EEG 4 meses después de su hospitalización muestra una actividad epiléptica en el hemisferio derecho. En este momento es cuando lo vi por primera vez. La questión es : ¿se cayó por las escaleras debido a un estado epiléptico preexistente debido muy probablemente a la vacuna que recibió el día anterior o se volvió epiléptico después del traumatismo? Para mí la causa más probable era la vacunación y por tanto empezé el tratamiento con DTPol en potencias crecientes, cada potencia 2 veces en una semana desde la 30K hasta la XMK. Después de este tratamiento, las ausencias desaparecieron completamente y ya no estar como ido. El tratamiento aún se repitió cuatro veces en cuatro días consecutivos para evitar las recaidas y completar la curación. Se disminuyó paulatinamente el Depakine hasta pararlo completamente al cabo de 2 meses, en buena cooperación con su pediatra. Un EEG mostró que no quedaba ningún signo de epilepsia. Caso 2 Las vacunas pueden causar una gran variedad de enfermedades. Es imposible atribuir transtornos específicos a cada vacuna determinada. Se producen toda clase de problemas físicos, pero también emocionales y mentales. Julia tenía 2 años cuando la visité y padecía de una grave artritis crónica juvenil. Tuvo por primera vez una otitis y una bronquitis entre la segunda y la tercera dosis de DTPP/HiB, y tuvo estos mismos problemas 3 veces más, tratados siempre con antibióticos. Sus problemas reumáticos empezaron a los 21 meses, con diarrea y la rodilla derecha hinchada; pronto empezó a hincharse también la izquierda, y tenía rigidez sobretodo por las mañanas y rechazaba caminar. Se le administraron inyecciones con corticosteroides en ambas rodillas, pero la severidad de su enfermedad no hizo más que aumentar. Cuando la ví era incapaz de andar debido al dolor y a la atrofia del cuadriceps. Su reumatólogo quería empezar el tratamiento con metrotexate. Que sus problemas reumáticos empezaran 5 meses después de la Triple vírica no significa que no existiese correlación. En nuestra investigación propectiva el 17% de complicaciones se producen después de más de 5 semanas. Para mí, es probable que su sistema inmunológico estuviera ya dañado por la vacuna DTPP/HiB. Pero precribí primero Trilpe vírica, porque era la última vacuna que había recibido. Su temeperatura subió hasta los 39,5ºC durante 3 días. Para la agravación le dí Triple vírica 30K en dilución durante 3 días, hasta que pasó la fiebre. Empezó a beber y comer mucho mejor. Después de 2 semanas, recibió DTPPol/HiB en potencias. Durante la primera serie sus deposiciones se volvieron muy malolientes, pútridas, y se encontraba muy cansada. Después de repetir la serie completa 3 veces, lo que duró 2 meses, se encuentra mucho mejor. El apetito, la piel, el sudor durante el sueño, todo estar mejor y ella se encuentra mucho mas vital, abierta y espontanea. “Esta sí es mi Julia” dice la madre. Ambas series de Triple vírica y DTPP/HiB se repitieron y se recuperó cada día más, después inició un tratamiento con Saccharum Off 30K. Actualmente esta sin molestias desde hace más de medio año y sin tratamiento alopático. Es capaz de andar normalmente, la hinchazón y la inflamación han desaparecido y su velocidad de sedimentación es normal de nuevo. Caso 3 No sólo los médicos alópatas no se dan cuenta la mayor parte de las veces del daño vacunal a sus pacientes, también en el mundo homeopático este fenómeno esta subestimado. Muy a menudo el carácter del niño cambia en un estadío tan temprano que ni los médicos ni los padres se dan cuenta de ello. Creo que hay dos razones principales para el aumento de la agresividad y la violencia en nuestras sociedades modernas. Cada día más el comportamiento de nuestros jóvenes se acerca más a la criminalidad. La primera razón son las vacunas, la segunda la mala calidad de los alimentos modernos con los azúcares refinados, los aditivos, los pesticidas, colorantes, etc… El próximo caso es el de una niña de 20 meses, Maud. Sus problemas empezaron una semana después de la Triple vírica con diarrea y vómitos y una otitis media bilateral. Fue hospitalizada y tratada con antibióticos y ORS. Después de esto se le fue el apetito, se le quedó una rinitis permanente con mucosidad verdosa, esta muy sedienta y tiene infecciones óticas de repetición. El médico de familia aseguró a la madre que excluía una relación con la Trile vírica porque la Triple vírica no podía producir infecciones intestinales. Su madre no me dijo nada de su caracter. Se empezó un tratamiento con Triple vírica en potencias crecientes desde la 30K hasta la XMK en cuatro días consecutivos. Después de la 30K pasó muy mala noche. Estaba triste, lloraba mucho, tosía fuertemente y tenía una respiración jadeante. Pero después de 3 días la rinitis se fue, volvió el apetito y bebía mucho menos. Estaba feliz, contenta y atenta de nuevo. Es otro chico ¡ decía la madre, y esto es lo que he observado en muchos casos, que después de la desintoxicación vacunal el caracter cambia dramaticamente y el niño vuelve de nuevo a ser divertido, feliz y adorable y pierde su agresividad e irritabilidad. Muchos padres no son conscientes de que su hijo sufra a nivel emocional, piensan que forma parte de su caracter. Las vacunaciones a edad tan temprana hacen que las comparaciones sean imposibles. Caso 4 Debido a la actitud errónea del mundo médico proclamando que las vacunas no generan efectos secundarios serios, una gran cantidad de pacientes perjudicados sufren innecesariamente, la mayor parte de las veces, el resto de su vida. Jolande tiene 34 años y es la madre de 2 chicos. Tiene una condición física excelente y hace mucho deporte. Como joven asistente en un hospital (a los 21 años) recibió su primera vacuna de hepatitis B. Poco después empezó a sentirse fatigada.Tres meses después este estado empeoró después de recibir la segunda dosis, ademas su concentración se vió seriamente afectada, estaba ojerosa, ya no podía digerir las grasas y perdió peso progresivamente (20 Kg). Empezó a padecer de dolores de cabeza en la zona occipital y a coger toda clase de infecciones, especialmente afecciones de garganta. Es incapaz de trabajar y cuando lo intenta como parte de la terapéutica, tiene que admitir que su salud es demasiado mala. Se siente encerrada en si misma y en su pequeño mundo. Finalmente es tratada en un hospital psiquiátrico, dispuesta a probarlo todo con tal de sentirse mejor, pero el psiquiatra no entiende el caso. Algo no encaja, y no parece tratarse de un problema psicológico, dice.Medio año más tarde entra en una depresión y toma prozac. Un año mas tarde contrae la mononucleosis, lo que la debilita aún más. Después sigue arrastrando su mala salud otros cinco años. Ha perdido completamente la confianza en su propio cuerpo. Es incapaz de hacer deporte y tiene que ir con mucho cuidado. Vino a verme a finales del 99 porque había curado al hijo de su hermana de un ezcema severo debido a vacunación. Su tratamiento fue simple. Recibió tres series de Hepatitis B a la 30,200,M y XMK. En un período de tiempo de unos 5 meses se recuperó completamente. Sus dolores de cabeza desaparecieron y es capaz de volver a hacer ejercicio. Su sistema inmunitario también estar más fuerte y ya no padece de infecciones recurrentes. Ha recuperado la confianza en su propio cuerpo y ya no necesita acostarse al mediodía. Caso 5 El problema más frecuente relacionado con consecuencias de vacunación es probablemente el daño del sistema inmunológico. Infecciones crónicas de oido, rinitis, bronquitis,..son muy comunes después de las vacunas. Los médicos creen en su mayoría que es normal que los críos pequeños tengan muchas infecciones, pero cuando las vacunas han sido desintoxicadas, muy a menudo estas infecciones desaparecen. Sander tenía 6 meses cuando me lo tgrajeron. Cuando tenía tres meses y medio tuvo una gripe con fiebre alta y empezó con sibilantes algunos días después. El médico de familia le recetó Salbutamol en inhalaciones, pero no mejoró y a pesar de darle Pulmicort , tampoco hubo mejoría. Al final necesito Prednisona. Esto ocurrió en un período de tiempño de dos meses y medio. Nadie se apercibió que en este tiempo recibió dos nuevas vacunas (DTPP/HiB) y que esta era la razón de su empeoramiento. Hasta los tres meses no había tenido ningún problema de salud. Cuando lo ví, justo acababa de empezar el día antes el tratamiento con prednisona. Su estado era bastante malo. Presentaba fuertes sibilantes y había una gran cantidad de mucosidades en los pulmones. La temperatura era de 38,3ºC. La relación con la repetición de las vacunas me pareció obvia, asi que le dije de parar La cortisona y precribí una dilución de DTPP/HiB a la 30K, una cucharadita de té cada hora, durante tres días. Se recuperó casi por completo en estos tres días. Después le receté una serie de 30,200,M y XMK en cuatro días consecutivos. Después de 15 días empezó de nuevo con sibilantes y se le recetó que repitiera otra vez la misma serie, y de nuevo dos semanas más tarde. Entonces su oido derecho empezó a supùrar, y le receté una dilución de la 30K de DTPP/HiB. Hizo grandes progresos, se siente mejor,estar más contento, duerme mejor, pero no se acaba de resolver la supuración ótica. La supuración huele mal, como huevos podridos, también su sudor es bastante maloliente e impregna atoda la habitación. Precribo Psorinum MK en dilución durante 3 días, pero se produce tan sólo una mejoría corta y no dispongo de la XMK. Entonces se le recetó Saccharun offic 200K y acabó de curarse completamente. Después de este episodio, todavía recibió 2 series más de la vacuna en dosis homeopáticas. Hasta el momento todas sus molestias han desaparecido, incluso su alergia a los gatos, perros y pájaros, su respiarción es perfecta, duerme profundamente y sin interrupción toda la noche. Sander es ahora un chico de 2 años, perfectamente sano y que no necesita de ningún tratamiento. La vacuna antigripal fue rechazada amigablemente por los padres. Caso 6 A menudo se ven problemas de comportamiento y desarrollo psicomotriz después de las vacunaciones infantiles. Xaviera es uno de estos niños. Cuando la trajeron de visita tenía un año de edad. Se caía hacia adelante o hacia atrás desde su asiento sin amortiguar la caida con los brazos, desde su cuarta dosis de DTTP/HiB a los once meses. Gritaba de forma histérica cuando sus padres intentaban acostarla en la cama y se agarraba desesperadamente a ellos. Dormía tan sólo 4 horas por la noche. Cuando dormía se despertaba con un sobresalto, estremeciéndose de todo el cuerpo, haciendo movimientos como dando golpes con los brazos y golpeándose la cabeza contra la cama. Dormía en posición genupectoral en vez de tumbada sobre la espalda. Su desarrollo psicomotriz se estancó e incluso hizo una regresión. Ya no sabía comer con cuchara y no cogía el biberón con las manos. Se asustaba en la oscuridad. No parecía la misma niña. Después de 2 semanas consultó a su pediatra que le aseguró que todo esto nada tenía que ver con la vacuna y le aconsejó realizar un EEG y acudir a una terapia conductal.La madre se enfadó y decidió consultarme. Prescribi DTTP/HiB en cuatro potencias en un periodo de cuatro semanas, dando dos veces cada potencia. Después de esta serie pareció renacer, ya no se caía más, dormía sin interrupción y paró de darse golpes con la cabeza asi como de gritar de forma histérica. Caso 7 Las complicaciones neurológicas estan estrechamente relacionadas con las vacunas como demuestra la experiencia japonesa (2). La causa más importante de enfermedades neurológicas graves con numerosas muertes, parece ser la vacunación temprana. Kitty es un buen ejemplo y fue tratada por un colega mio. Estaba estudiando medicina y quería hacer prácticas en Turquía. Le aconsejaron de ponerse la DTPol y eso hizo. Algunos días después empezó a tener dificultades para andar y gradualmente se vio condenada a una silla de ruedas. Tuvo que parar sus estudios de mediicina. Ninguna de las pruebas médicas pudo revelar una enfermedad concreta. Incluso se descartó de hacer más pruebas porque se consideró que su caso era psicosomático. Tampoco los diferentes remedios homeopáticos ensayados la ayudaron, hasta que un amigo le aconsejó contactar con otro médico homeópata dada la posibilidad de una posible relación con la vacuna DTPol. Toda su vida había tenido problemas con su sistema locomotriz, incapaz de hacer una larga caminada o de practicar deporte. Había tenido que hacer a lo largo de toda su vida ejercicios especiales de estimulación muscular y coordinación. Nunca se había encontrado una razón clara para todo aquello. Pero empezó a recuperarse desde el primer día en que empezó a tomar las vacunas potentizadas de DTPol. Su madre se dió cuenta de que había sido hospitalizada cuando era una niña, aproximadamente dos semanas después de la DTPP, debido a unos síntomas de tipo paralítico indeterminados, que desaparecieron en aquella ocasión al cabo de algunas semanas. Ahora es capaz de andar casi normalmente y todavía esta mejorando un año despùés de empezar el tratamiento homeopático. Dos años y medio en una silla de ruedas llegaban a su final y pudo reemprender sus estudios de medicina. Caso 8 También los problemas de comportamiento se hallan a menudo asociados a las vacunas. Frecuentemente estos problemas conductales en los crios mejoran de forma dramática cuando se desintoxican las vacunas. Las mamás dicen a menudo : “Otra vez vuelve a ser él”. Para mi resulta cada vez más claro que los problemas conductales serios tales como ADHD, PDD y autismo estan a menudo ligados a las vacunaciones. Tanto la DTPol/DTPP como la Triple vírica pueden dar origen a graves problemas de comportamiento. He observado que muchos de estos casos empiezan justo cuatro meses después de la Triple vírica. Con Tom los cambios empezaron el mismo día de la vacunación Triple vírica. Perdió el conocimiento durante 5 minutos y dos horas más tarde tuvo urticaria que desapareció al día siguiente, pero Tom ya no fue el mismo Tom de siempre. Antes de la Triple vírica, era un chico calmado, que comía de todo y que dormía hasta las siete de la mañana. Ahora esta muy inquieto, incapaz de obedecer y destructivo. No se puede concentrar y juega sin ningún interés. Tiene ataques de rabia, da patadas, puñetazos y es extremadamente insolente. Esta muy agresivo con los demás niños y los golpèa sin razón alguna. Suda mucho durante la noche y sus deposiciones son de olor agrio, ofensivas y muy delgadas. Tuvo diarrea hasta los tres años. Ahora tiene 6 años. Se despierta temprano por la mañana, a las 5 de la madrugada, y se ha vuelto muy difícil para comer. Golpea con un palo a cualquier cosa y tira piedras y arena a los demás niños. El diagnóstico oficial es PDD. Después de cuatro series de Triple vírica , esta mucho más calmado, su agresividad ha casi desaparecido y es mucho más afectivo. Vuelve a jugar normalmente y es capaz de explicar lo que significa. Ha vuelto a ser de nuevo “mi niño pequeño”, dice su madre. Sus alergias estan mucho mejor. Sus deposiciones siguen siendo muy malolientes. Probablemente aún necesita más series de Triple vírica para poder curarse completamente, pero en la actualidad es casi un chico normal. Investigación retrospectiva y descriptiva en Holanda en 1999 Todos los médicos homeópatas, miembros de la asociación holandesa de médicos homeópatas (VHAN), fueron invitados a rellenar un cuestionario con 20 preguntas a todos los nuevos pacientes visitados en 1999, que consideraran que habían tenido algún problema relacionado con las vacunas. En este cuestionario había tres grandes preguntas en el punto de mira : 1.¿Son los problemas post-vacunales mucho más frecuentes de lo que generalmente se cree? 2. ¿Qué tipo de problemas están en juego y con qué vacunas se relacionan? 3. ¿Qué tratamiento se ha usado y con qué resultados?. Recibimos 209 casos, lo que constituye un número de respuestas muy satisfactorio. Resultados La mayoría de los pacientes/padres respondieron el cuestionario por propia iniciativa (173), 11 fueron remitidas por médicos, no pediatras!. No hubo diferencias significativas entre sexos. La mayoría de los pacientes eran niños de edad inferior a los 2 años. El diagnóstico de reacción post-vacunal se hizo en la mayoría de los casos porque los transtornos empezaron después de la vacunación (133) o porque aumentó la intensidad de los transtornos después de la vacunación (35) y solamente en 10 casos el diagnóstico se hizo a través del cuadro clínico. Las vacunaciones responsables fueron DTPP/HiB en 114 casos, DTPP en 31 casos, Triple vírica en 60 casos, DTPol en 14, DTP/Triple vírica en 3, Antigripal en 5, HiB en 6, vacunas tropicales en 4, BCG en 3, Hepatitis B en 2, Tétanos en 1. Para comprender estos números es importante saber que la vacuna DTPP/HiB se repite 4 veces durante el primer año y que la HiB se da raras veces sóla. Que la vacuna DTPol se da una vez sola(4 años) y otra conjuntamente con la Triple vírica (9 años)*, que la vacuna Triple vírica se da 2 veces, una vez sola a los 14 meses y otra conjuntamente con la DTP a los 9 años. Que no hay una vacunación en masa de la BCG y que sólo los profesionales médicos u otras profesiones de riesgo se vacunan de la Hepatitis B. La pregunta interesante es : ¿Cuanto tiempo después de la vacuna se manifiestan por primera vez los transtornos desencadenados o agravados por ella? Durante el primer día en 51 casos, entre el segundo y el tercer día 28 casos, entre el cuarto y el séptimo día 18 casos, durante la segunda y tercera semana después de la vacunación en 38 casos, entre la cuarta y quinta semana en 7 casos y en la sexta semana o posterior en 30 casos. En muchos paises los transtornos que aparecen después del tercer día post-vacunal ya no se consideran en modo alguno relacionados con la vacuna. En nuestra investigación, eso significaría que el 54% de los casos serían injustamente rechazados. Los principales problemas resultantes de vacunación son los problemas de piel en un 40% de los casos, los respiratorios en un 56%, los digestivos en un 21%, los neurológicos en un 18%, problemas en el desarrollo en un 7%, transtornos emocionales en un 21% y molestias generales (malestar, debilidad, insomnio, problemas inmunológicos, etc..) en un 32%. El lapso de tiempo transcurrido entre el inicio de los problemas y la primera consulta con el homeópata era bastante grande, la mayoría de pacientes/padres hicieron un largo recorrido para encontrar ayuda, en parte debido a la falta de un diagnóstico correcto. Estos períodos eran de menos de una semana en 8 casos, de una a cuatro semanas en 13, de uno a tres meses en 35, de cuatro a doze meses en 60 y más de un año en 92 casos (44%). Es importante señalar que la presencia o ausencia de una reacción aguda como preludio de los transtornos crónicos no es una buena indicación para identificar la causa. En el 30% de los casos no hubo ninguna reacción aguda. La duración de la reacción aguda fue menor de un día en el 32% de los casos, de uno a tres días en el 46% y superior a tres días en el 22%. Sólo tres casos fueron comunicados al servicio de vigilancia de efectos secundarios de vacunas (RIVM), es decir el 2% de los casos. En la mayoría de los casos (141) nadie –paciente, padres o médico- pensó que hubiera alguna relación con la vacuna, en 32 casos los padres/pacientes pensaron que existía alguna relación con la vacuna, pero no pensaba lo mismo el médico. Solamente en 11 casos tanto los padres/paciente como el médico pensaron que existía una probable relación. El tratamiento homeopático consistió mayormente de vacunas potentizadas (94%), y en un 62% se dio además el remedio constitucional, ya fuera durante o después del tratamiento con vacunas potentizadas. El tratamiento con Thuja se aplicó sólo en el 2% de los casos. En el 73% de los casos se usó exclusivamente tratamiento homeopático, mientras que en un 27% los pacientes recibieron algún otro tipo de tratamiento, la mayoría de veces broncodilatadores, corticoides, antiepilépticos, etc… Los resultados del tratamiento hoemopático son interesantes. En la mayoría de casos no tan sólo hubo una ligera agravación inicial (161) , sino que la agravación fue bastante intensa en 41 casos. Sesenta y cuatro pacientes (31%) se curaron completamente, Ochenta y nueve (43%) obtuvieron una mejoría sustancial. Esto significa que un 74% de pacientes se cuaron o mejoraron mucho, lo cual es un muy buen resultado. En 32 casos hubo sólo una ligera mejoría, y en 17 ningún tipo de resultado, mientras que en tres casos hubo un ligero empeoramiento. Estos resultados fueron obtenidos en un promedio de 63 días. En el 48% de los casos el seguimiento es de més de medio año. La estimación de la probabilidad de relación entre el transtorno y la vacunación precedente, se estimó, antes del tratamiento, como muy probable en 86 casos, probable en 86 y en 30 casos no había una opinión formada. Después del tratamiento, se estimó que en 135 casos la relación de causalidad era muy probable, que en 43 era probable, en 6 casos no había una opinión formada y se estimó como improbable en 12 casos y como muy improbable en 4. Esto significa que el número de opiniones formadas aumentó fuertemente después del tratamiento, lo cual ratifica el uso de las vacunas potentizadas como herramienta diagnóstica. Investigaciones adicionales En Holanda estamos planificando de llevar a cabo 2 investigaciones de seguimiento. La primera va a ser un estudio controlado con grupo placebo sobre el valor preventivo de la administración de la vacuna en 200K. Se va a estudiar, durante un período de dos años, el número de visitas al médico de familia, número de tratamientos antibióticos, frecuencia de los transtornos de piel, respiratorios, digestivos y neurológicos, además de algunos otros items. Un segundo estudio, también con un grupo placebo de control, se centrará en examinar la eficacia del tratamiento con vacunas potentizadas en pacientes afectos del síndrome post-vacunal. Homeópatas experimentados van a ser los encargados de seleccionar a los pacientes. El objetivo es dilucidar si las vacunas potentizadas pueden ser usadas como instrumento diagnóstico. Conclusiones La Homeopatía dispone de un potente instrumento de diagnóstico, prevención y tratamiento de los daños derivados de las vacunas. Millones de niños y adultos pueden ser ayudados de una manera eficaz si los homeópatas estan bien instruidos en este campo y aprenden a observar y a no pasar por alto las reacciones post-vacunales. La Homeopatía tiene la capacidad de mostrar al mundo médico qué efectos secundarios derivan de las vacunas y la manera como tratarlos. Bibliografía 1. The treatement and prevention of Post Vaccinal Disease. Tinus Smits, en colaboración con Yvonne Pernet; Homeopathic Links 4/94 2. Report of the task force on Pertussis and Pertussis inmunization. Pediatrics 1988, vol 81,nº6,part 2,p.973 2. The Post-Vaccination Syndrome. Tinus Smits; edición Personal, 1996. *Nota del traductor : estos datos corresponden al calendario vacunal holandés. Un estudio parecido se hizo aquí en España (proesva) y se halla publicado en Natura medicatrix y en International vaccination newsletter. Autor: Dr. Tinus Smits. Más información en http://www.post-vaccination-syndrome.com/3840/pvs.aspx Traductor: Dr. Joan Mora Artículo publicado en la Revista Homeopática de la Academia Médico Homeopática de Barcelona. Marzo del 2002;44:17-24.

2 comentarios:

Melinda dijo...

Me diagnosticaron cirrosis hepática y hepatitis B y me administraron un medicamento. La picazón y los vómitos cesaron pero luego empeoraron con mucho dolor, volví al hospital y me dijeron que la hepatitis y la cirrosis son crónicas, que los síntomas ya no se pueden controlar y que no hay cura. El dolor seguía empeorando cada día hasta que perdí el apetito por la comida. Hace aproximadamente 2 meses un amigo me contó sobre el Dr. Iyabiye, cuya recomendación vio en línea, que probé y me curé después de tomar su medicación. Fui al hospital para otra prueba y di negativo tanto para CIRROSIS como para HEPATITIS B. Información del médico: (+ 234-815-857-7300) e (iyabiyehealinghome@gmail.com)

Dr. Isidre Lara i Llobet dijo...

Querida Melinda:

¿Qué tiene que ver su enfermedad con la reacción post-vacunal, motivo de este post?
Y el tratamiento, ¿fue un tratamiento homeopático el que la ayudó a curarse? No conozco al Dr. Iyabiye.